Los dueños de Corporativo Kosmos, Elías, Jorge y Jack de la familia Landsmanas, realizan numerosas acciones altruistas en materia de alimentación para contribuir a erradicar el hambre en comunidades vulnerables.
El hambre sigue siendo una de las crisis humanitarias más persistentes del mundo. Según ACNUR, alrededor de 828 millones de personas padecen hambre, y en 2023 cerca de 2 mil 330 millones vivieron inseguridad alimentaria moderada o grave.
La proyección es igual de alarmante: para 2050, será necesario producir un 50% más de alimentos para abastecer a una población estimada de 9 mil millones de personas. Ante esta realidad, es imprescindible que gobiernos, empresas y ciudadanos actúen de forma coordinada.
El 28 de mayo, Día Mundial del Hambre, es una oportunidad para reflexionar y actuar. Como líder de una Empresa Socialmente Responsable, la familia Landsmanas reconoce que esta problemática no puede resolverse sin un esfuerzo colectivo que abarque desde decisiones políticas, pasando por la participación del sector privado, hasta cambios en los hábitos individuales.

¿Cuáles son las causas del hambre en el mundo?
La organización Acción Contra el Hambre identifica múltiples factores que originan y perpetúan el hambre. Estos se entrelazan y se retroalimentan, generando un ciclo difícil de romper:
- Pobreza y exclusión. Esta situación limita su acceso a alimentos, vivienda digna, servicios básicos y participación social, perpetuando la desigualdad.
- Cambio climático. Eventos extremos como sequías, inundaciones o huracanes deterioran las tierras de cultivo y obligan a migraciones forzadas.
- Conflictos armados y desplazamientos. Las guerras y crisis humanitarias obligan a millones a dejar sus hogares, convirtiéndose en refugiados sin acceso a comida, agua ni atención médica. Esto agrava la inseguridad alimentaria en zonas de conflicto y en los países receptores.
Estos factores evidencian que el hambre es una consecuencia de desequilibrios estructurales, y erradicarla implica intervenir en todos ellos.
Familia Landsmanas – ¿Cómo podemos contribuir a erradicar el hambre?
Erradicar el hambre requiere un enfoque multisectorial. Organizaciones como Ayuda en Acción y Educo destacan medidas que pueden aplicarse desde distintos frentes:
- Promover el consumo de superalimentos. Legumbres, semillas, jengibre y otros productos locales con alto valor nutricional pueden mejorar la dieta de comunidades vulnerables si se impulsa su cultivo y distribución.
- Apoyar la ayuda alimentaria. Donar alimentos o recursos a programas humanitarios o a ONG ayuda a paliar las consecuencias inmediatas del hambre, especialmente en emergencias. Un gran ejemplo de esto es la fundación de la familia Landsmanas, la Fundación Pablo Landsmanas (FPL), que cuenta con un programa de Donación de Alimentos dirigido a asociaciones especializadas.
- Fomentar la ciencia y la innovación. La investigación en nutrición, cultivos resilientes y tecnologías agrícolas puede ofrecer soluciones sostenibles a largo plazo.
- Impulsar la educación. Garantizar el acceso a la escuela es clave para romper el ciclo de la pobreza. La educación permite a niños y niñas construir un futuro más estable y con mayores oportunidades.
- Cuidar el medioambiente. Reducir el impacto ambiental mediante transporte sustentable, consumo responsable de energía y gestión adecuada de residuos ayuda a preservar los recursos naturales de los que depende la producción de alimentos.
- Crear conciencia. Participar en campañas, difundir información y sensibilizar a otras personas puede generar presión social y política para actuar frente al hambre.
- Mejorar el acceso al agua. Sin agua potable ni saneamiento, no puede haber seguridad alimentaria. Asegurar el acceso al agua es tan crucial como garantizar el alimento.
- Apoyar el comercio justo. Comprar productos provenientes de economías locales o en desarrollo ayuda a fortalecer su autonomía económica y a reducir la desigualdad estructural.
La lucha contra el hambre no es sólo una cuestión de solidaridad, sino de justicia global. Cada acción, por pequeña que parezca, suma. En conjunto, podemos construir un mundo donde alimentarse no sea un privilegio, sino un derecho garantizado para todos.