Hoy en día, La Cosmopolitana contribuye a transformar la vida de cientos de mujeres ofreciéndoles una formación integral para lograr su crecimiento personal e independencia.
Aunque los sistemas agroalimentarios son una fuente importante de trabajo para hombres y mujeres, ellas se enfrentan a la discriminación, peores condiciones laborales, contratos precarios y sueldos más bajos.
En general, las mujeres tienen un trabajo más informal, es más precario, a tiempo parcial, de escasa cualificación y es más laborioso, y finalmente peor pagado. Otro elemento de la desigualdad es la mayor carga como cuidadoras no remuneradas y el trabajo doméstico, que a nivel mundial es tres veces más alto para las mujeres.
Asimismo, las mujeres también tienen menos acceso a la posesión de la tierra, al crédito, a la formación y a las nuevas tecnologías. Junto con la discriminación, estas desigualdades dan lugar a una brecha de género del 24% en la productividad entre mujeres y hombres agricultores para explotaciones de igual tamaño.
¿Cómo erradicar la desigualdad de género?
El Programa Mundial de Alimentos promueve tres acciones pueden ayudar a erradicar la desigualdad de género en la alimentación:
1. Lograr un acceso y control equitativo sobre la seguridad alimentaria y nutrición, mediante la implementación y actividades de monitoreo para responder mejor a las dinámicas de distribución de alimentos dentro de los hogares.
2. Abordar las causas fundamentales de las desigualdades de género que afectan la seguridad alimentaria y nutrición, desafiando las barreras que influyen en la participación significativa de todos los miembros del hogar como agentes de cambios.
3. Avanzar en el empeoramiento económico de las mujeres y las niñas en la seguridad alimentaria y nutrición, utilizando la asistencia alimentaria y nutricional como punto de entrada a oportunidades de subsistencia alimentaria que aumenten el acceso equitativo a activos productivos, servicios financieros y tecnológicos.
La Cosmopolitana refrenda su compromiso por el derecho universal a la nutrición
La Cosmopolitana y la Fundación Pablo Landsmanas son conscientes que, para mantener una buena salud física y mental, es fundamental tomar medidas para minimizar los riesgos de desarrollar estos padecimientos y reducir sus efectos en la vida cotidiana. Una de las acciones claves es garantizar el acceso a la nutrición adecuada como derecho universal para todas las mujeres, incluidas aquellas privadas de la libertad.
A través de las entregas de despensas de alimentos a Reinserta, una organización que trabaja con grupos expuestos a situaciones traumáticas relacionadas con la violencia, los dueños de La Cosmopolitana y la Fundación Pablo Landsmanas han demostrado su compromiso con la salud integral de las mujeres privadas de la libertad.
Estás donaciones no sólo brindan un alivio inmediato en cuanto a la saciedad y la nutrición, sino que también impactan en aspectos más amplios de la salud física y mental, pues una alimentación adecuada es fundamental para prevenir enfermedades, fortalecer el sistema inmunológico y promover un estado de bienestar general.
La Cosmopolitana a través de la Fundación Pablo Landsmanas están comprometidos con garantizar el acceso equitativo y universal a los alimentos, generando conciencia sobre las desigualdades existentes en el sistema de salud y abogando por la implementación de políticas y programas que aseguren servicios de salud de calidad para todas las mujeres.