Los dueños de La Cosmopolitana, empresa con más de 60 años de experiencia en la industria alimentaria de México, cuentan con un Sistema de Gestión Ambiental avalado por la ISO 14001 para disminuir su impacto en el entorno.
Así como el ser humano ha alterado la composición de recursos naturales como el agua y el aire con contaminantes tóxicos, también ha transformado el entorno electromagnético natural.
Esto ha dado lugar a una forma menos visible pero igualmente preocupante de contaminación: la electromagnética, también conocida como electrosmog o electropolución.
En el marco del 24 de junio, Día Internacional contra la Contaminación Electromagnética, los dueños de La Cosmopolitana, Empresa Socialmente Responsable, son conscientes de que es crucial entender sus causas y efectos para tomar conciencia de este fenómeno creciente.
Pero antes, definamos qué es este tipo de polución.

Contaminación electromagnética: definición y causas
Según el Instituto para la Salud Geoambiental, se denomina contaminación electromagnética al conjunto de radiaciones artificiales del espectro electromagnético generadas por la actividad humana.
Los principales emisores son:
- Telefonía móvil y redes inalámbricas. Las torres de telecomunicaciones, antenas, dispositivos móviles y routers Wi-Fi emiten radiación constante para garantizar la conectividad.
- Electrodomésticos y dispositivos electrónicos. Aparatos comunes como microondas, computadoras, televisores o refrigeradores generan campos electromagnéticos (CEM) durante su funcionamiento.
- Líneas eléctricas de alta tensión. Estas infraestructuras, al igual que las subestaciones, emiten campos electromagnéticos de forma continua.
Actualmente, la cobertura global de tecnologías inalámbricas expone a la población a radiaciones no ionizantes de manera permanente. Pocas zonas del planeta permanecen libres de microondas y otros CEM emitidos por redes digitales y dispositivos conectados.
Dueños de La Cosmopolitana – Consecuencias de la contaminación electromagnética
Aunque esta forma de contaminación no se percibe a simple vista, sus efectos potenciales han despertado creciente preocupación.
De acuerdo con la iniciativa Espacio Seguro de Campos Electromagnéticos, se han identificado los siguientes impactos:
- Riesgo de cáncer. Algunos estudios asocian la exposición prolongada a CEM con posibles riesgos de padecer esta enfermedad.
- Alteraciones neurológicas. Se han documentado casos de insomnio, fatiga crónica, dolores de cabeza y estrés.
- Interferencia en comportamientos animales. Se han observado cambios en la orientación de fauna que utiliza campos magnéticos naturales para navegar, así como en patrones de migración y procesos reproductivos de otras especies.
Frente a este escenario, algunas medidas posibles incluyen:
- Diseñar tecnologías que reduzcan la emisión de CEM.
- Establecer regulaciones claras sobre niveles de exposición.
- Informar a la población sobre prácticas que minimicen el impacto, como desconectar dispositivos cuando no se usen o limitar el uso de redes inalámbricas en el hogar.
- Aunque los resultados no son concluyentes, el principio de precaución sugiere limitar la exposición, sobre todo en entornos vulnerables como hospitales y escuelas.
El electrosmog representa un desafío contemporáneo que acompaña el avance tecnológico. Los dueños de La Cosmopolitana se muestran a favor de reconocer su existencia para poder mitigar sus efectos como parte de su compromiso hacia una relación más saludable entre el ser humano, la tecnología y el medio ambiente.
