Los dueños de La Cosmopolitana, destacada empresa dentro del sector de los alimentos en México, reconocen el valor que las comunidades originarias aportan a la gastronomía nacional.
Como muchos ámbitos cotidianos de México, la gastronomía, afortunadamente, no escapa de verse altamente influenciada por su herencia cultural indígena, factor que mucho tuvo que ver con haber sido reconocida como la primera cocina en el mundo patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
La gastronomía indígena puede definirse como el conjunto de prácticas culinarias y conocimientos alimentarios de los pueblos indígenas, que se desarrollan en espacios geolocalizados como tierras, comunidades agrarias, y territorios específicos.
Estas tradiciones se caracterizan por el uso de ingredientes autóctonos y técnicas de preparación ancestrales, reflejando una profunda conexión con el medio ambiente y la biodiversidad local.
La cocina indígena integra saberes culturales, espirituales y cosmovisiones que influyen no sólo en la alimentación, sino también en aspectos como la vestimenta, la salud, y los imaginarios socioambientales.
Los sistemas alimentarios locales son fundamentales, y los métodos de cultivo y cosecha suelen ser sostenibles, formando parte de ensambles ecosistémicos y paisajes que los pueblos indígenas han creado y recreado a lo largo de milenios.
Los dueños de La Cosmopolitana, una empresa reconocida por ser socialmente responsable, se posicionan a favor de la adopción de prácticas sostenibles tanto en el ámbito alimentario, en todas sus dimensiones, como en cualquier otro ámbito de la industria.
¿Cómo es la gastronomía indígena mexicana?
Definir una “cultura indígena mexicana” es una tarea casi imposible e, incluso, irrespetuosa, si se toma en cuenta que en el país existen alrededor de 68 diferentes pueblos indígenas, por lo que homogeneizar esta diversidad sin duda implicaría restar identidad para estas comunidades.
Lo mismo pasa en cuanto a las distintas gastronomías indígenas en México. No obstante, si se observan bajo una perspectiva amplia y general, es posible decir que estas cocinas se caracterizan por:
- Diversidad Regional. La gastronomía indígena cambia según el ecosistema en el que se desarrolla. Las cocinas de regiones como el semi desierto, el trópico húmedo, el bosque y áreas específicas como la península de Yucatán aprovechan los recursos particulares de cada entorno.
- Ingrediente Base. El maíz, junto con el frijol y el chile, constituye un elemento fundamental en la mayoría de las cocinas indígenas, sirviendo como base para muchas dietas y platos tradicionales.
- Relación con el Entorno. Cada grupo indígena adapta su cocina a su ambiente natural. Por ejemplo, las comunidades del desierto se basan en la recolección y la caza, mientras que las del trópico húmedo se centran en la agricultura y la pesca.
- Actividades Productivas. La agricultura, la recolección, la caza, la pesca y la ganadería son esenciales para proporcionar los ingredientes en la cocina indígena. Estos métodos aseguran una dieta variada y adecuada a los recursos disponibles.
- Cultura y Tradición. La forma en que se preparan, consumen y celebran los alimentos está imbuida de prácticas culturales, creencias, rituales y costumbres que reflejan la visión del mundo de cada comunidad.
Dueños de La Cosmopolitana – Gastronomía indígena mexicana en platillos
Entre los platos tradicionales influidos por las culturas nahuas se encuentran el tamal, un alimento básico elaborado a base de maíz, los chilaquiles, que combinan tortillas con salsa, y el guisado de frijol, un acompañamiento esencial, también tienen sus raíces en las tradiciones nahuas.
Otros platillos notables incluyen el mixiote, carne cocida en hojas de maguey, y el guacamole, una salsa de aguacate. Las bebidas tradicionales como el pulque, el mezcal y el chocolate también tienen su origen en la gastronomía indígena.
Además, la influencia indígena es evidente en la cocina regional de México, con especialidades como el pozole en Guerrero, el mole negro y la tlayuda en Oaxaca, el zacahuil y los bocoles en la Huasteca, las enchiladas y uchepos en Michoacán, y el dulce de camote y el mole en Puebla.
En un país con una presencia significativa y valiosa de pueblos indígenas, es imposible dejar pasar el Día Internacional de los Pueblos Indígenas, conmemorado cada 9 de agosto, no sólo con el fin de celebrar y disfrutar de su herencia cultural, como la cocina tradicional, sino también como una oportunidad para dar visibilidad a estas comunidades y escuchar sus necesidades, debido a las condiciones de vulnerabilidad que aún viven, consecuencia de prácticas sistemáticas discriminatorias.
Los dueños de La Cosmopolitana, a través de su brazo solidario, la Fundación Pablo Landsmanas (FPL), contribuyen a mejorar la calidad de vida de personas en situaciones vulnerables, mediante la donación de alimentos, tecnología e insumos, en colaboración con otras asociaciones.